Queridos Reyes Magos

¡Hola a todos y feliz año nuevo!

Siento la pequeña demora en la publicación de nuevos posts pero me pilláis en plenas vacaciones navideñas y no me resisto a disfrutar de los míos, salir, reencontrarme con amigos y todas estas cosas que me he propuesto hacer sin estreses ni prisas. Así que me ha costado un poco más que de costumbre volver a ponerme delante del ordenador. Pero aquí me tenéis, con las pilas cargadas y muuuuchos proyectos y positivismo para este 2013. Que venga como quiera, que ya le pondremos una sonrisa.

Antes de nada, quería agradeceros todas vuestras visitas y comentarios durante 2012. Ha sido maravilloso comprobar que hay mucha gente "al otro lado" que dedica un poquito de su tiempo a leer lo que escribes y a compartir sus ideas. Cada vez que alguien me dice "¿Tú eres la del blog?" ¡os juro que me dan unas ganas terribles de freíros a abrazos!

Y sin más, aprovecho este post para enviar mi carta a los Reyes Magos de Oriente.

Queridos Reyes Magos:

Este año, creo que me he portado muy bien (y si no estáis de acuerdo, exijo una respuesta argumentada).

He currado como una campeona en la oficina, he hecho mis pinitos como cocinera en casa, he logrado ser más o menos regular en la publicación de mis posts en el blog y hacer bastantes proyectos DIY y desdoblarme para tener vida personal. Vale, en el tema de comprar trapitos no me he controlado nada, ¡pero es que algún defecto hay que tener!

Así que aquí os dejo mi lista de deseos, bastante visual para que no haya lugar a dudas:

Deseo...
Una mesa de madera para la cocina (y, por ende, una cocina en la que quepa una mesa de madera jajaja) como ésta:

para desayunar sin miedo a que se me manche el sofá de café (el sofá es mi tesoro, al más puro estilo Golum), cocinar con los amigos alrededor (bueno, más bien que el señor B cocine conmigo alrededor tomándome una copita de vino) y poder invitar a comer a más de dos personas a casa (en verano, ampliamos aforo con la terraza pero en invierno... el tema anfitrión lo llevamos regular).

Un despacho bonito, como éste:

para escribir más relajada aún. El despacho sigue siendo mi asignatura pendiente, aunque estoy en ello. Prometo testimonio gráfico.

Un vestidor... el de Carrie Bradshow me vale, no hace falta que os compliquéis la vida... dejad los Manolo Blahnik dentro, que ya me encargo yo de darles salida.

El sillón Arizona de Maisons du Monde

para leer los domingos por la tarde, café en mano.

Una bañera antigua

¡Y muchos días de sol para disfrutar de mi terraza!

Si veis complicado traérmelo todo, priorizad el tema del sillón... que es una cuestión de vida o muerte, ajajaja y si el sillón tampoco es posible, me sirve con que mi casa siga igual: llena de risas y con olor a café por las mañanas y a pimientos al horno y vino los fines de semana. Llena de amigos en verano y viéndonos disfrutar como hasta ahora.

Esto último, seguro que podéis traérmelo.
Y para los lectores de este blog, mucha salud y mucha suerte para el nuevo año. Que sigamos compartiendo muchas ideas y mucho tiempo.

El agua para los camellos y los vasos de leche os los dejo en la cocina. El tiramisú, ni tocarlo, ¡que es para llevarlo a casa de unos amigos!

Besos,
Clara