miércoles, 26 de septiembre de 2012

Antes y despúes de una puerta como organizador de cocina

¡Hola a todos!

Ya hacía tiempo que no os traía un "antes y después". Así que aquí tenéis uno:

Antes
La idea en sí es muy buena. Reutilizar la hoja de una puerta que nos sobra como soporte de organización para la cocina. El único problema: queda un poco soso. Demasiado blanco y a la puerta le faltan enganches de los que poder colgar los utensilios.

Después
El mismo concepto con un toque de color y añadiendo más colgadores. Sencillamente genial. ¡Ni siquiera parece la misma puerta! El amarillo aporta alegría (si nos parece un color demasiado rotundo como para verlo a diario, quizás podríamos optar por un verde limón, un grosella... algún color igual de alegre pero menos penetrante).

Y, si no tenéis espacio suficiente en la pared de vuestra cocina para montar un organizador como éste, quizás podríais hacerlo detrás de la puerta de entrada a la cocina, si la disposición de la misma os lo permite. Es una forma de aprovechar el espacio y de desahogar las superficies que quedan a la vista.

Espero que os haya gustado.
¡Un abrazo!

2 comentarios:

  1. mmm, creo que para empezar, a mi cocina le haría falta simplemente una puerta...

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  2. Ya! yo tampoco tengo puerta en la mía... ¡no me cabe! Así que cortinilla de rafia al canto :)

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