Con sus azulejos y sus macetas, son lugares que siempre están frescos y que siempre huelen a tierra mojada y a flores.
El de mi madre, concretamente, está empezando a parecerse a la selva amazónica pero es que a la mujer las plantas se le dan que es un gusto... quién tuviera su habilidad.
Por supuesto, no podemos dejar de dedicarle un huequito en este post a los patios cordobeses.
En ellos, son las macetas las protagonistas estelares y se pueden ver cosas tan maravillosas como éstas:
Me encanta el color añil... estoy intentando hacer algo parecido en mi terraza, aún sin éxito. Pero cuando tenga algo "enseñable", prometo dedicarle un post.
En Sevilla, los hay tan bonitos como éste de la Calle Alfonso XII:
Fotos vistas aquí
En Jerez, también tenemos patios increíbles:
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Éste es el de la casa palacio de Petra de la Riva, una fantástica vivienda privada cargada de historia |
¡Espero que os hayan gustado!
Un abrazo
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